miércoles, 9 de septiembre de 2009

Militante no simpatizante

Quizás eres de esas personas a las que un día, se les pasa por la cabeza que “estaría bien” formar parte de un partido político. Desgranemos ese “estaría bien”:

Estaría bien por las posibilidades de hacer cosas por otras personas.

Estaría bien de cara a implicarte dentro de una organización que lucha por mejorar el sitio donde vives.

Estaría bien ya que las oportunidades de poder decidir qué se hace en el pueblo o en la ciudad, cómo y por qué, recaerían en ti, ahora de forma más directa.

Estaría bien porque el sistema democrático actual requiere de fórmulas como la existencia de partidos políticos para llegar a gobernar en tu pueblo o en tu ciudad.

Estaría bien porque trabajarías con otra gente a la que le gustaría conseguir lo mismo que tú estás diciendo.

Estaría bien, sí es verdad, estaría bien. Entonces, ¿Qué es lo que no está tan bien?

No está tan bien que andes por las nubes, instalado en lo ilusorio y en las quimeras.

No está tan bien que los discursos vayan por un lado y las actuaciones por otro totalmente distinto.

No está tan bien que los partidos políticos se conviertan en un servicio de oferta de empleo para muchas personas.

No está tan bien que la mayoría de partidos políticos no apoyen las listas abiertas.

No está tan bien que a la mayoría de partidos políticos les importe mucho más, unos militantes que otros.

No. No está tan bien. Y aún así, tu, te has empeñado en formar parte de.

Estupendo. Me alegro de saberlo. Ya eres militante de un partido político. Eres de esas personas a las que les gustan los retos, el intentarlo las veces que haga falta; porque te gusta participar de una forma activa, en algo y para algo. Porque no puedes soportar las injusticias, porque eres una persona crítica y comprometida. Porque crees de verdad en el valor de lo que haces y sabes muy bien para qué lo haces. Porque piensas que las cosas se cambian desde dentro. ¿Sí?

¿Y se puede saber, si es posible, dónde estás?